Como buenas fans de los formatos pequeñitos, estaba claro que en algún momento teníamos que caer en la tentación y probar los minis en formato cajetilla de cerillas. ¿Los has visto? ¡Son tan chulos! Te caben en la palma de la mano y dentro están llenos de boniteces y detalles. Estuve investigando con el formato y finalmente acabé haciendo esta mezcla de tarjeta y mini-álbum inspirado en las cajetillas… y no podría estar más contenta con el resultado.
Utilicé cartulina negra para hacer la estructura de caja de cerillas. Y para decorarla, los papeles de #MilkMedia, aprovechando algunos de los textos de las tarjetas de la última página. Monté la estructura de forma que se abre hacia abajo y luego se desplega una sola solapa hacia el lado para mostrar la tarjeta Disfruta. Me encanta esa tarjeta, porque está llena de alegría.
A la portada le di un toque de gesso para hacer que los elementos de encima llamaran más la atención… y porque me apetecía manchar un poco, la verdad. Para los detalles, utilicé unos troqueles de hojas que, al ser tan finitos quedan espectaculares. Y para la portada, un troquel de flor espectacular junto con otros en forma de espiral. ¿Te he contado que me apasionan los troqueles? ;)
Un poco de pasta de stencil teñida de amarillo por aquí, unos mini trocitos de papel grapados por allá y la costura negra en mini zigzag (¡no podía faltar la costura!) y en un momento montas un detalle perfecto para regalar, creado con pedazos sobrantes de otros proyectos.
¿Te has fijado en dos de los detallitos más simpáticos? El pequeño tornillo para decorar es amor del bueno. Y esa mini solapa amarilla no me digas que no es genial.
Anímate con las cajitas de cerillas y deshazte de ese pequeños restos de #MilkMedia que te resistes a tirar. Verás qué cosa tan chula queda y qué rápido te marcas un mini-mini-mini con el que alegrarle a alguien el día.
Que kuki!!!M’encanta!!!