Hay veces que me apetece hacer algo muy loco y otras veces me apetece que todas las páginas del álbum tengan el mismo tamaño. Y a veces hago minis que están a medio camino, como este. Empezó siendo un álbum apaisado con las portadas forradas y estructura con anillas. Pero al final me dio por una portada cuadrada y cada página un centímetro más ancha que la anterior. Ah, y cadenitas en vez de anillas. Y quedó esta monería mixmediera.
Una portada con collage
Papel, gasa, tela, pasta de textura, puntilla y un texto. Un mini collage siempre es una buena idea para decorar una portada con muchos elementos y que quede equilibrada: usa formas más o menos cuadradas en las piezas que quieres combinar y pégalas, cóselas o grápalas también en una forma más o menos cuadrada. Ese es el truco del equilibrio.
Haz die cuts con los textos de las tarjetas
En Paperinky tenemos unos textos muy cañeros y unas tarjetas con mucha tralla. Pero no te cortes en aprovechar esos textos como títulos de tus álbumes y recórtalos como si fueran die cuts. Quedan genial. Y puedes aprovechar el resto de la tarjeta para dar capas a la decoración de las páginas.
Tres ideas que siempre quedan bien
Lo mejor es que la decoración tenga una coherencia al ir pasando las páginas de tu álbum. Y si vas a decorar con pinturas, a veces es fácil perderse y acabar con un batiburrillo.
Aquí tienes tres ideas para unificar las páginas y que se note que forman parte del mismo álbum.
1. Cose. Y luego cose un poco más. (Juas). Una costura ya no sirve solo para aguantar dos trozos de papel, ahora es un elemento decorativo. Así que pierde el miedo, agénciate una máquina de coser (la más sencilla ya sirve) y dale un buen meneo a las costuras. Atrévete con puntos rectos, zigzags e incluso esos bordados que quedan tan vistosos. Y si no, pues #aguja&hilo ¡y a mano!
2. Si la página te ha quedado muy heavy (tú ya me entiendes: demasiado color, demasiado guerrera, demasiado potente) suavízala con un trozo de puntilla. Pero ojo, procura usar la misma puntilla, o al menos el mismo tipo, en las páginas que la necesites. Que tu álbum no parezca un muestrario de mercería (otro juas). Si quieres, hasta puedes teñirla con un poco de pintura.
3. Las solapas y las grapas te salvan la vida. Las solapas te las haces con esos restos de papeles que te quedan de hacer diecuts. Y las grapas pues, ¿qué te voy a contar? Que estoy enamorada, que las tendría en todos los colores del mundo y que le des a la fantasía para hacer que solo se vean por un lado de la hoja y que por el otro queden tapadas con algún elemento.
Y un truco de regalo: Para escribir tus textos, usa trozos de papel que imiten páginas de libreta. Aunque sea un mini. Le dan un toque super chulo. Y si no te gusta tu letra, puedes escribir a máquina y pegarlas después en tu álbum.
No te olvides de darle tu toque personal con:
- Pasta de textura y pigmentos en el fondo. ¿Te has fijado en las fotos de más arriba? Viva el mixmedia.
- Distresa, desgarra o arranca los trocitos de papel que uses en el interior. Le da una textura espectacular.
- Deja hilos sueltos. Cuando cosas, no cortes los hilos del todo. Esos hilachos que salen le dan un punto.
Y disfruta del proceso de un mini álbum tan divertido como este. Le puedes poner unas fotos en blanco y negro, que te quedarán espectaculares.
Si te ha encantado el álbum y los truquillos, déjanos un comentario aquí abajo, que nos encanta leerte.
Que divinoooo. Me encanto❤️Muchisimas por todos tus tips.
Muchos cariños
Hola María! Muchas gracias por dejarnos un comentario, que nos hace mucha ilusión! Me alegro de que te hayan gustado los tips y el proyecto.
Guauuu. Os acabo de descubrir y me encanta. Que manos! Gracias por compartir
Hola Isabel! Bienvenida a Paperinky! Me alegro mucho de que te haya gustado lo que ves. Estamos también en Instagram, por si quieres seguir nuestros directos y tener mucha más inspiración. :) Gracias mil por tu mensaje.