SONRÍE. A veces necesitamos que alguien nos lo recuerde. Así que este es un álbum para fotos de momentos que me hacen sonreír al recordarlos. Un álbum encuadernado utilizando el cartón trasero de la colección Boro (ya sabes, ¡aquí se aprovecha todo!) y usando también papeles de la colección #MilkMedia. Porque se llevan muy bien, las dos juntas. ¿Lo has probado?

Album blanco Sonríe con Boro

Tejano, recortes azules y un detallito con vellum es todo lo que hace falta para darle a la portada un toque de texturas y capas, que ya sabes que me flipan. Mis dos grapas y mi eyelet (¡cómo me gustan estos eyelets gigantones!) que no falten. Y ese SONRÍE grandote sobre un fondo de puntadas japonesas le dan un toque.

Para el interior he hecho una espina sencilla y páginas dobladas que se pegan a cada espina. Y las he decorado muy poquito, porque he elegido papeles muy llamativos y no quería que la foto se perdiera entre tanta decoración.

Album blanco Sonríe con Boro

Y ¿qué me dices del lomo? Creo que me he enamorado de esa cadena blanca y queda bien chulo con las dos franjas de tela y tejano. Las he puesto para dar fuerza al álbum, pero la verdad es que decoran un montón con esas diferentes puntadas de hilo azul cielo. Y por detrás, acabado sencillito, porque el papel de fondo ya tiene suficiente fuerza y no quería taparlo demasiado.

Album blanco Sonríe con Boro
Album blanco Sonríe con Boro

Armonía. En realidad siempre se trata de un juego de equilibrios: colores, formas y decoraciones tienen que estar en armonía, sin olvidar que lo más importante es la foto. Esa que te arranca una sonrisa cuando la miras.