En 1997, el artista suizo M. Vänçi Stirnemann exhibía en Zurich 1200 tarjetas de 2,5×3,5 pulgadas realizadas específicamente para poder intercambiar por trabajos de otros artistas al final del evento. Nacían la Artist Trading Cards o ATC.

Poco a poco las ATC se han hecho un hueco en el mundo scrapero, mayoritariamente en el mixmedia, y muchas scraperas crean series de tarjetas artísticas que intercambian con otras en eventos del sector. Por ejemplo, en la feria Scrap+ de Sitges.

Cómo las tarjetas suelen ser una síntesis de los artistas que las hacen, decidí que las mías tenían que ser amarillas y rosas sobre un relieve de pasta de stencil y con toques de negro. Todo, sobre papeles de la colección #milkmedia.

Además, las rematé con piezas de tejano, eyelets y toques de pintura chalk dorada, que son algunos de mis adornos preferidos ahora mismo. Solo espero haber arrancado una sonrisa a las que las recibieron… y me encantaría que las utilizaran para integrarlas sus propios proyectos.